El Lago de los Memes y las Obras Muertas

Yo argentino puedo hablar con total libertad de las idiosincrasias rusas como si fueran propias. Ernesto Sábato(1) dijo que los rusos y los argentinos son más o menos lo mismo: países pendientes de todo lo que hace Europa, ya sea para seguirla ciegamente o llevarle la contra. Esas son las dos tendencias políticas y artísticas en pugna en ambos países. Sábato mismo quiso ser Dostoievski, aunque menos loco y todavía más angustiado. Tchaikovski, autor del soundtrack del Lago de los Cisnes y principal ejemplo de este ensayo, también fue en algún momento considerado el Dosto de la música, en el sentido de máquinas de hacer llorar. Pero estuvo en los dos bandos. Nació con un padre que le dijo que no servía para músico y tuvo una educación francesa. Su apellido es ucraniano, y significa gaviota. En realidad Chaika es gaviota. Chaikovski sería Gaviotoski o algo así, no importa. Casi un cisne. Se entiende.

El famoso Bolshoi, el teatro donde estrenó el Lago de los Mismos, tenía por idea contrarrestar la influencia europea (sobre todo italiana) en la música de aquella época. Por eso el enorme aguilón de dos cabezas por todos lados, el escudo de la casa imperial rusa. Ese escudo venía de Iván III, el Gran Duque de Moscú (2) que dejó de pagarle tributo a los mongoles en el siglo XV, y se autoproclamó estado independiente. Un símbolo nacionalista. Sin embargo, esa águila bicéfala estaba en las armas bizantinas. Y dado que los descendientes de Constantino ya no reinaban en Constantinopla, Iván en realidad estaba clamando ser el heredero de aquella casa griega, sumando a su matrimonio con Sofía Paleóloga de la línea imperial.

Sin embargo, su tradición era en muchos aspectos más tártara qué europea. Era autocrático a la ilimitada manera de los monarcas asiáticos, y su cristianismo era también oriental, el ortodoxo, que había llegado a Rusia mucho antes de la conquista mongola, de la mano de misioneros búlgaros de Constantinopla. Destaco además que el águila bicéfala también era un símbolo hitita de poder imperial. Y también islámico, y asirio, y todo así durante cuarenta minutos de listado asiático (3). Atención con las cadenas meméticas (4), una construcción de ironías y referencias metatextuales tan complejas que se cagan en la figura del autor.

Toda la trama de Lago de los Cisnes podría haber ser explicada con memes, pero eso hubiese sido una historieta. Tampoco una forma particularmente novedosa. Hay historietas pintadas en las paredes de cavernas neolíticas. Además, el plot no tiene mucho que ver con la importancia de la obra, que pasa más bien por sus Leitmotifs. Las theme songs de los distintos personajes. En cuanto a los memes, podemos centrarnos en los cisnes y las ballestas.

La trama del Lago de los Cisnes empieza con un príncipe libertino al que le es informado que debe casarse. Hablando de memes que se salen de control, él no es exactamente parte de la tradición de los caballeros cisne (como Lohengrin o Hyoga), aunque ciertamente es una derivación wagneriana porque se llama Sigfrido, como el protagonista del Cantar de los Nibelungos. Chaikovski sentía una gran admiración por Wagner, como casi todos sus contemporáneos exceptuando al conde Tolstoi. Tolstoi se caracterizaba por detestar lo admirado por casi todos sus contemporáneos. A Shakespeare, por ejemplo. Tenía toda una teoría moral del arte que nos vendría muy bien ahora que no sabemos que bosta hacer con todo el arte hecho por hijos de puta consumados (5).

En fin, Wagner era un compositor muy popular, y Tchaikovski era fana. Para él, las referencias Wagnerianas serían como los memes de los simpsons.

Otra presencia viva en el imaginario sería la de Luis (Ludwig) II de Baviera, quien fue mecenas de Wagner. Era un rey que se decía que estaba un poco loco de la cabeza, perdido en el mundo del teatro de una manera casi quijotesca. Ante sus súbditos asumía la persona de un príncipe azul, y usaba su fortuna personal para construir castillos de cuento de hadas. Al igual que Chaikovski, tenía grandes conflictos con su sexualidad.

La muerte de Luis también es muy similar a uno de los finales de nuestro Sigfrido (6), pero eso viene después. Por ahora la historia sigue en que Sigfrido está triste y como son todos alemanes, sus amigos deciden que el mejor plan de acción es llevarlo a matar cosas. Esas cosas son, por supuesto, cisnes.

¡Ahora puedo hablar de cisnes! En la literatura védica, a la gente que alcanzó altas capacidades espirituales se les dice Cisne Supremo (“Paramahamsa”) por la gracia espiritual de los cisnes y su habilidad para recorrer diversos mundos espirituales. Si mezclas agua con leche se toman solo la leche. Además comen perlas. Apolo, el dios de tener conflictos con tu sexualidad, tenía un carro tirado por cisnes. En Francia, Rabelais explicó que el cuello de un cisne era el mejor papel higiénico que había encontrado jamás. En Inglaterra todos los cisnes son propiedad de la Reina, así que si cazas uno para comertelo vas a terminar en la Torre de Londres. Si sos un rebelde que hace sus propias reglas, primero tenes que hervirlo un toque para que sea más fácil sacarle los huesos. Después lo condimentas con sal, pimienta y jengibre. Enmantecarlo con lujuria y cubrirlo con pasta de cebada (o papel de aluminio con birra si vivis en el siglo XXI),y al horno 1 hora por kilo de pájaro. Cuando se hornee, metele mas manteca por el agujero donde estaba el cuello antes de que se lo cortases pre horneado con tu fiel cuchilla de carnicero (lo desplumaste también, no?). Ahora comételo rápido antes de que lleguen los agentes de su majestad a romperte la cabeza por atrevido.

Voy a virar. Le estoy queriendo pegar un ballestazo a la obra como Barthes y Foucault le querían pegar un tiro al autor. Lo que quiero decir es que no hace falta escuchar una nota del lago de los cisnes para entenderlo en su conjunto. Alcanza con mirar elementos sucedáneos. Generalmente se entiende que hubo un Tchaikovsky de carne y hueso que vivió, se peleó con un Breakfast Club de compositores rusos nacionalistas contemporáneos y murió en algún momento del siglo XIX.

El otro Tchaikovsky es el personaje literario que la Crítica construye basándose en él. Una narrativa. La obra es uno de sus atributos, como su máscara mortuoria. Y a la vez él es un atributo posible de la obra. Borges nos iluminó con eso de que toda obra es un entramado de citas. Incluyendo ese enunciado, que parte de algo que dijo Coleridge de que toda la literatura es hija de una sola pluma, ésta:

Y Roland Barthes agregó que si la obra es un entramado de citas, el compilador baja de lvl. Pasa de ser Autor, con mayúsculas y un culto de seguidores, a un escritor, con minúscula y un entourage de acusadores de plagio. Pasa de ser Dios, a ser nada más que un sacerdote. Al mismo tiempo, surge la figura del Lector, que es el que le transmite el sentido último. No es un Dios en el sentido bíblico, omnipotente y furibundo, sino en el sentido moderno (7), una fuerza misteriosa y abstracta que se mueve por atrás del mundo y lo anima. Y si el nacimiento del lector se paga con la muerte del autor, parece que la muerte del Autor se paga con la muerte de la Obra. Eso es lo que es un meme, no ya como sentido de genes para ideas sino como esta maravilla:

Una obra sin autor, que parece haber cobrado existencia espontánea a partir de la jodida nada. No es la realidad. Evidentemente alguien la hizo, pero ese alguien es un x que no tiene importancia. En ultima instancia se crea. Un amanuense de las potencias profundas de Internet, que se hubieran canalizado en el cuerpo de otro pobre diablo si el primer pobre diablo hubiese muerto de combustión espontánea. Aunque no hayas escuchado el lago de los cisnes, lo escuchaste. Aunque no hayas leído el Quijote, lo leíste. Aunque no hayas leído a Kant (8), lo leíste. Conoces los memes, conocés la obra. Lo que queda de la Obra, de su cadáver, parece que es nada más lo que se puede compartir.

“La obra no es nada más que lo que se puede compartir” sería un lindo y conciso final, pero es evidente que esto no conviene. Nada de la postmodernidad conviene. Entro en modo Retorno del Rey con muchos finales: Un mundo absoluto de Autores y Obras es mucho más lindo que el otro. Mucho más motivador para ponerse a trabajar con la esperanza de entrar algún día a ese panteón, aunque sea póstumamente. Pensá en lo garcha que es Star Wars desde que decidieron matar a todos sus héroes y mitologías.

Desgraciadamente, crees o no crees. Es más lindo creer, pero más honesto sacar la ballesta y disparar ballestazos. La pugna de los rusos y los argentinos es también la pugna del arte. Colectivamente se decidirá si es mejor que haya un centro totalmente falso, o que seamos todos marginados.

(1) Repito yo resumiendo y sacándolo de contexto como haré con todos los autores que figuran en este ensayo.
(2) El título de Zar (César, otro europeísmo) no se empezó a usar hasta Iván IV, el terrible, en el siglo XVI.
(3) Y no voy a empezar con las águilas que tienen TRES cabezas, porque eso ya es cualquiera.
(4) Los memes son formas primitivas de los signos, conceptos, unidades de información transmisible.
(5) Otro ensayo, secuela de este potencialmente.
(6) Spoilers.
(7) O super antiguo, si te caben el hinduismo y el taoismo.
(8) Nadie lee a Kant.


Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.